Por Paz Puga
El derrocamiento del modelo de televisión tradicional a manos de Netflix comenzó hace siete años, y me aventuro a afirmar que mientras los ejecutivos de las principales emisoras se preguntan ¿Cómo lidiamos con Netflix?, los cerca de 100 millones de suscriptores se preguntan ¿cuándo tendré tiempo para ver una nueva producción?, ¿cuándo podré terminar la ya iniciada? o bien, ¿Cuál película o serie ha de ser la próxima?
A las dos primeras preguntas, Netflix da respuesta ayudando a sus suscriptores a planificar su consumo y permitiéndoles que accedan a sus contenidos según su disponibilidad de tiempo. Todos los viernes, Netflix recuerda, con avisaje digital, que sigue ahí y que es un compañero ideal para los tiempos de ocio; y, por otra parte, permite que el visionado de cada usuario sea segmentado, indicando en cada visita lo que vio anteriormente y permitiéndole reanudar lo que dejó a medias. ¡Gran ayuda!
En cuanto a la pregunta ¿Cuál película o serie ha de ser la próxima?, Netflix responde con una amplia e inabordable oferta de contenidos audiovisuales que solo profundizan el dilema. Muestra también, sobre cada contenido, un porcentaje que es el resultado de las valoraciones y selecciones hechas por el propio usuario en visitas anteriores. Estas sugerencias, arrojan números bastante altos y parejos y no afinan los suficiente el foco.
¿Cómo producir en el usuario la sensación, aunque sea ilusoria, de que está por elegir realmente lo mejor para sí mismo y que podrá aprovechar al máximo su “momento Netflix”?
¡Las sugerencias de nuestros pares podrían ayudar! ¿Cuántas veces nos han recomendado una serie o película y al momento de entrar a la plataforma no recordamos cuál es?
Se extraña en Netflix una comunidad tipo Spotify con acceso a recomendaciones de pares y de personas que admiras. Se extraña también un acceso directo a mini sinopsis (de no más de 15 segundos) que se activen al pasar por cada aviso del home sin tener que hacer clic.
Si se incorporasen estas mejoras y se entrecruzasen sus números, los usuarios harían su selección considerando tres parámetros: La valoración de su experiencia pasada, la valoración de otros y la infalible valoración de ver una pequeña muestra de cada contenido sin salir del home. Se reduciría así el tiempo de selección, se tendría mayor certeza al escoger y una mejor experiencia de “vitrineo Netflix”.
Así, como los ejecutivos de las alicaídas cadenas televisivas están diseñando y lanzando nuevas plataformas para poder competir, Netflix puede dar pasos que aumenten aún más su ventaja, incorporando nuevas herramientas de búsqueda y construyendo con sus suscriptores una verdadera comunidad virtual.